Síguenos

Actualidad

¿ES LA CESIÓN DE LA PARCELA A LA IGLESIA CATÓLICA UNA BUENA DECISIÓN?

Asegurar la felicidad para el mayor número, así afirmaba Jefferson su compromiso con la política y así lo entiendo yo, haciendo de ello nuestra máxima y objetivo constante.



En numerosas ocasiones hemos defendido todo tipo de dotaciones en parcelas municipales, con el objetivo de fomentar las relaciones humanas y hacer que la soledad, motivo por el que mueren muchas personas en nuestro mundo, no tuviese cabida en nuestra ciudad.

Todas estas dotaciones significan que en estas parcelas y en estas instalaciones, el acceso se hace en unas determinadas condiciones, tanto en las deportivas, como en las educativas, las que son para mayores, los centros de salud, las viviendas sociales, los locales de ensayo, para asociaciones , etc  y no he conocido a nadie que entienda que hacerlo en estas condiciones y no al libre albedrío sea motivo de injusticia o exclusión. Además, no todos utilizamos todas, algunos incluso ninguna, y sin embargo sí entendemos y vemos lógico que existan y que nuestros vecinos las disfruten.

En una sociedad en la que todos contribuimos, además de al nuestro, al bienestar de los demás con nuestros trabajos e impuestos, no sólo debemos pensar en nosotros mismos y en nuestras necesidades, puesto que si no, muchos de estos servicios serían inviables, sino en que, sin expoliar a nuestros ciudadanos y sin tirar el dinero, sepamos buscar la felicidad para el mayor número.

Con esta filosofía, hemos decidido que la Iglesia Católica tuviese reconocimiento y lugar en el nuevo desarrollo de nuestra ciudad. La religión según la World Values Survey es importante para el 84% de la población. Mitiga el estrés. Reduce la tasa de suicidios. Aporta consuelo y seguridad en un mundo de incertidumbre. Promueve las relaciones sociales. Aumenta el sentimiento de permanencia a una comunidad y desarrolla sociedades más integradas. Con estas razones ya es imposible negarse a tal ubicación.
Aún así, no debemos descartar el argumento esgrimido de que existen otras dotaciones necesarias como colegios, residencias, nuevos centros de salud en nuestra ciudad, pero para éstas,  lejos de enfrentarnos a la escasez, sabemos hay parcelas de sobra en el nuevo crecimiento, con una pequeña diferencia y es que, en todos los casos, menos el de la residencia que seguimos estudiando en Ciudadanos, nosotros, como Administración Local, podemos solicitarlo a la Administración Autonómica, pero es ella la  que valorará la necesidad. No podemos hacerlo por nosotros mismos.

Podemos estar o no de acuerdo con los dogmas o la fe que profesan los católicos, podemos recurrir a la Historia para soliviantar  a unos y otros y buscar sentimientos encontrados pero nuestra generosidad intelectual tiene que partir del reconocimiento no sólo de los efectos que ya he desgranado, sino de la increíble labor social que realizan en nuestra ciudad, con la mínima ayuda, desde ayudas con las adicciones, a la Lanzadera de Empleo, pasando por Cáritas, es innegable que estas magníficas iniciativas están ayudando a construir nuestra ciudad, llevadas a cabo por admirables  personas voluntarias que a través de sus creencias, entienden la ayuda a los demás como un propósito de vida reconfortante y útil.

Para qué partir de posiciones intransigentes y atávicas para criticar algo que no influye en las políticas que nos afectan a los demás por parte de nuestra Administración y no ser generosos y defender nuestros intereses cuando el servicio que prestan es innegable. El secreto de la felicidad está en tomar buenas decisiones y desde Ciudadanos sabemos que esta lo es.

Aruca Gómez
Portavoz de Ciudadanos

Continuar leyendo
Click para comentar

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Actualidad